¡Buenos y esperados días!

Y es que me encantan estos post, ya no sólo por probar paletas durante un tiempo sino por probarlas fuera de casa, de Viaje.

Esta vez el maquidiario gira en torno a una de las palabras del nombre de la paleta: Sorpresa. No porque no esperara la calidad de la paleta, que siendo de Colourpop mala no podría ser, sino porque la ciudad me ha encantado. Empezamos ya que me lío.

La paleta viene en una caja de cartón como todas las de este estilo de Colourpop con un diseño un tanto especial que creo que representa bien los tonos de la paleta.

La paleta como tal es de cartón con cierre magnético, como digo siempre mis favoritos, y tiene el mismo diseño de la caja lo cual me gusta.

Una vez abierta vemos que no es de las que tienen espejo, como la Salvaje o la You Had Me At Hello, pero precisamente por eso es más barata. Justo alrededor no tiene el estampado, lo que me gusta porque no tienes miedo de borrarlo al limpiarla.

El esquema de colores me gusta porque tiene una mezcla entre subtono cálido, frío y neutro muy acertada. Tiene tonos marrones básicos, tonos rosas, rojizos y morados, varios de ellos duocromo. Además, la paleta tiene mezcla de acabados: 5 sombras son mate, una mate con glitter y seis satinadas o metálicas.

Estos son los swatches de la paleta:

Calidad Colourpop, qué más puedo decir.

¡Y pasamos al viaje!

Los dos primeros días el tiempo fue un poco horroroso, pero todo es como te lo tomes.

Primer día: lluvioso paseo arquitectónico

Para mi primer día en Oporto opté por usar el tono rosa potente de la paleta, me llamaba no podía hacer otra cosa.

Llevo polvo translúcido como base, la sombra mate más clara de la paleta en la transición con la otra mate más clara en la cuenca. Llevo el tono berenjena en la v externa y el rosa cantoso en el párpado con un poquito del blanco duocromo a rosa en el lacrimal.

El día fue muy lluvioso pero aún así pudimos pasear por el centro de la ciudad y conocer uno de sus estilos arquitectónicos por excelencia: los azulejos. Visitamos la Plaza de los Aliados, la estación de San Bento, la Iglesia de San Ildefonso y el Palacio de Cristal y sus Jardines.

¿Queréis saber qué más visitamos? La zona de fiesta nocturna, que está cerca de la Torre de los clérigos. Y no pude desaprovechar la ocasión para sacarle más partido a la paleta, maquillando a mis amigas mientras degustábamos vino y queso local (motivo por el cual no recuerdo bien los tonos que usé en cada una, lo siento 🤣). Los maquillajes resultantes son interesantes porque cada una tiene un tipo de ojo muy diferente y la técnica a emplear es diferente.

Acerina: párpado caído. Usé la paleta de Colourpop y la Melted Chrome de Essence en el tono 02 sobre un cut crease. A pesar de tener que falsear la cuenca por encima de la suya para que se vea con el ojo abierto no tenemos por qué renunciar a técnicas como esta: simplemente al aplicar corrector debemos abrir el ojo para que nos marque los límites del cut crease justo a ras de la cuenca falsa.

Sara: cuenca marcada, poco párpado móvil. Este tipo de ojo es de los más sencillos de maquillar, porque prácticamente todo lo que hagamos se va a ver. Me centré en darle profundidad al ojo y difuminar el final hacia arriba, ya que la forma natural de los suyos acaba ligeramente hacia abajo.

Ana: ojos pequeños. Quería salir del marrón y el azul y le planté un maquillaje borgoña/morado. Con este tipo de ojos simplemente necesitas brochas más pequeñas o finas, ya que con mis brochas de difuminar habituales le podría maquillar de una pasada el ojo entero.

Si os fijáis el tipo de maquillaje es similar en todas (o lo era en un inicio, hasta que Ace me pidió subir la intensidad y nos tiramos de cabeza al cut crease y al glitter) y bastante básico, pero quería experimentarlo en distintos tipos de ojo para saber adaptarlo correctamente en un futuro (y debía ser algo sencillo de recrear para ellas).

Segundo día: Bolhao, la Sé, Ribera del Duero y Bodegas

Para el segundo día opté por un look neutral para poder hacer lo que ya creo que es también tradición de los Maquidiarios: llevar mi Russian Red en los labios.

Llevo polvo translúcido como base, el tono anaranjado mate de abajo en la cuenca, el marrón mate con glitter en la V externa (si quieres que no se transfiera mucho glitter sacude el pincel un poco antes de aplicar el producto) y el shimmer rojizo en el párpado móvil. Justo después de hacerme la foto de cerca, justo antes de salir me percaté de que había olvidado añadir en el lacrimal el dorado, por lo que en el resto de las fotos lo veréis aunque en esta no esté.

Visitamos el mercado de Bolhao (o lo que queda, porque lo están restaurando y solo se puede ver la fachada y lo de dentro es un descampado ahora mismo), la calle Santa Catarina y la capilla de las Almas (en la foto), la Sé de Porto (que es como llaman a la catedral), la ribera del río, el puente de Luis I y después hicimos una visita con cata a las bodegas Sandemans. También intentamos visitar por dentro el Palacio de la Bolsa, pero estaban todas las visitas completas y no pudimos.

Tercer día: Torre de los Clérigos, vuelta al río y al aeropuerto

Para este último día elegí los tonos morados, ¡Cómo no! No podía irme sin probarlos.

Llevo polvo translúcido como base, el marrón frío de la fila de la derecha en la cuenca, el tono mate rosado de la última fila en la v externa y el tono morado duocromo en el párpado móvil.

Este día sólo tuvimos tiempo de subir a la torre de los clérigos, comer por el río e ir al aeropuerto. Las vistas desde arriba son impresionantes, pero las escaleras de subida son… Muy estrechas y altas, ¡Ojo claustrofóbicos!

¡Y esto es todo!

La paleta… Qué decir, calidad Colourpop: pigmentada, fácil de trabajar y con una consistencia ni muy cremosa ni muy seca. De mis fórmulas favoritas, no es sorpresa para nadie.

Oporto me ha gustado mucho: es una ciudad manejable para verla en un fin de semana con tiempo para poder degustar su gastronomía y su vino, muy bueno. Además, la gente es muy cercana y amable, muy acogedora.

¡Nos vemos en el siguiente post!